Por fin, en la playa ...
Este año, como ya pasó el año pasado, hemos tenido que esperar hasta finales de agosto para que bajara el nivel del pantano donde pesco habitualmente, y así mostrar las playas de arena, playas que tanto gustan a las carpas. Pero por fin he podio disfrutar de una jornada "playera"... Los peces se acercaban tanto a la orilla, que hozaban con medio cuerpo fuera del agua... Ha sido una mañana muy entretenida con la caña de línea 5, con más de tres horas de actividad, dándome la oportunidad de poder orillar una docena de peces, además de las varias roturas durante la pelea. Muchos peces se asustaban cuando la ninfa caía muy muy cerca, pero si el lance era preciso, a la distancia adecuada, era sorprendente ver la agresividad de muchos de los peces a la hora de tomar el engaño. El único "pero" que puedo poner ha sido la cantidad de barro que se acumulaba en las zapatillas, que molestaba al andar. Otra vez la ninfa de