Ron nos dejó ...
El cariño que se les tiene a nuestros perros supera el ámbito de la caza. Son nuestros fieles compañeros con los que convivimos muchos años. Es una pena que solo disfrutemos de su compañía durante una pequeña parte de nuestra vida. En mi caso he tenido varios perros de caza, la mayoría desde cachorros. Y siempre es duro verles llegar a su final. Ayer tuve que tomar una difícil decisión, sacrificar a Ron, mi braco alemán con 12 años. Durante esta docena de años he disfrutado de su compañía, de un perro cariñoso y leal, pasando muchos y muy buenos momentos y también alguno malo, ya que con apenas un año sufrió un accidente que le fracturó la cadera. Tuvo varias operaciones y varias complicaciones durante años, haciendo que tuviera que dedicarle mucho tiempo y esfuerzo en su recuperación, surgiendo así un fuerte vínculo entre ambos. Con el paso de los años, esta rotura degeneró poco a poco en una artrosis, que limitó la vitalidad de esta raza. Nunca me planteé "quitarlo", como