PESCARLITOS

Como ya he expresado alguna que otra vez, la caza menor ocupa la mayoría de mis salidas de caza. La caza mayor también me ha atraído estos años, pero la fórmula de batida cada vez me llama menos la atención. Antaño asistía a numerosas batidas al jabalí, pero estos últimos años apenas voy a una o dos batidas al año.  Quizás porque considero que son muchas horas de dedicación para un resultado  exiguo la mayoría de las veces. Quizás porque el cazador medio (escopetero más bien) que asiste a estas batidas me hace huir de muchos de estos eventos, lo cierto es que prefiero cazar la menor con mi perrillo antes que asistir a batida tras batida. No obstante la caza en espera, si surge la ocasión, si me llama la atención, con más gusto si estamos en verano, donde la espera se hace más llevadera con la buena temperatura. Este verano he probado suerte en noches con y sin luna, pero como ya comenté  sin usar "trampas" infrarrojas o similares para delatar a la pieza. Teniendo  así una des

No, no he vuelto a los años del COU, recordando  lo mal que lo pasamos con los dichosos exámenes de selectividad. Uso esta palabra para referirme a lo selectivas que estaban las truchas pescando a seca en la última salida de pesca. Estuve en el EDS del Tormes Salmantino. Por la mañana estuve pescando a ninfa en el famoso chorro de este EDS. Y sorpresa, estuve solo las dos horas que mojé mis ninfas en estas corrientes. Quizás por el escaso caudal de agua que bajaba (13 m³) o por otro motivo, el hecho es que no hubo actividad y solo algún  pitajo se dejó engañar. Para no hacer monótona la jornada me acerqué al embalse de Santa Teresa  a ver si veía algún barbo desde el muro y me encontré  con un fuerte viento (25km/h) que hacía  imposible localizar apenas ciprínido alguno con el oleaje. Pero en el río el viento apenas molestó y se podía lanzar aunque el bajo no se estirase perfectamente La actividad en el río en superficie fue muy buena por la tarde durante cerca de tres horas, de 5 a 8